La cocina es parte fundamental de toda cultura y por supuesto, no podía ser de otra manera en Camboya. En la cocina khmer destacan ingredientes como el prahok, hierba de limón, azúcar de palma, galangal, tamarid y lima de kaffir lime y hojas de lima de kaffir. Reconozco que cuando viajo me gusta probar los platos locales aunque me cuesta bastante recordar sus nombres. De hecho, acabo de pedir la carta del restaurante del hostel para hacer algo de memoria Por el momento, he probado: pescado a la parrilla con ensalada de mango y carne de res cocida al estilo camboyano. Esta última es una sopa deliciosa y de momento mi preferida. El primer día también comí una especie de ensalada de cangrejo con menta y mucho, mucho, mucho picante, de cuyo nombre no quiero acordarme. Error de principiante, casi fallezco en ese bar.
Así que, para conocer mejor las exquisiteces de la cocina camboyana me apunté a un curso de cocina impartido por el restaurante Frizz y cuya experiencia te recomiendo. Yo cogí la opción de medio día aunque también puedes cocinar durante todo el día. La opción que yo escogí tiene dos partes: en la primera, el guía-cocinero te llevará al mercado de Kandal, un mercado local en donde únicamente se vende comida. Aquí te enseñará y explicara los productos típicos de la cocina khmer. En la segunda cocinarás dos platos con tus propias manos y lo más importante, comerás los platos cocinados por ti.
La experiencia del mercado fue mi primera inmersión en un mercado tradicional y la verdad es que quedé fascinada de ver interactuar a los lugareños. Las motos, tan presentes en la vida asiática, se mueven a sus anchas entre los peatones y resulta toda una aventura lidiar entre la gente y las motocicletas. El olor es algo que también llama la atención también. Las carnes, incluidos los cerebros de cerdo, utilizados para la sopa, se exponen sin ningún tipo de protección. A los pescados, en especial al pez tigre, les cortan la cabeza vivos acompañados de su río de sangre correspondiente. Si a todo esto añadimos el calor de la región los mercados tienden a tener un aroma particular. Si eres algo aprensivo quizás no te resulte agradable, aún así yo quedé fascinada por el conjunto de cosas que ocurrían en aquel lugar, incluso me gusto el olor.
La segunda parte, la de cocinar fue una experiencia divertida y afortunadamente realizada en equipo. Nunca se me ha dado bien cocinar y el momento crítico en el que había que crear un plato de una hoja de plátano fue solventado por el guía. Durante este curso cocinamos primero Chaio Yor, rollitos de primavera al estilo camboyano, y de segundo “amok”, un plato tradicional presente en casi todos los restaurantes, que se puede servir con pollo o pescado. En mi caso lo preparé con pescado.He de decir que milagrosamente no me corte ningún dedo y me quedaron ambos platos medianamente decentes.
Hasta aquí llegan mis primeras inversiones en la cocina khmer. Y tú,¿ has hecho algún curso de cocina mientras viajabas?
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Hola tienes aun el contacto de las clases de cocina. En un par de días me moveré a Phnom Pehn y me encantaría tomar algo recomendado por alguien más. Gracias por compartir, saludos
Autor
Hola Ale,
Acabo de añadir el link al restaurante. Yo lo que hice fue pasarme por ahí y reservar directamente. Ya me dirás si te gusta tanto como a mí.
Un abrazo,
Eli